PBI entrevista a Iván Madero, miembro de la Corporación Regional para la Defensa de los Derechos Humanos, (Credhos). La organización se creó en 1987 y PBI les acompaña desde 1994. Iván, por su trabajo en defensa de los derechos humanos, ha sido amenazado y víctima de persecución, hasta tal punto que tuvo que salir del país. Repasamos con él la situación de las personas defensoras de derechos humanos en la región del Magdalena Medio.
PBI: ¿Cómo surge el movimiento social en Barrancabermeja?IVÁN: Surge por la organización de las comunidades y la población en la búsqueda de una solución a sus problemas. Surge en la década de los setenta con la Organización Femenina Popular. Sin embargo, mucho tiempo atrás, las organizaciones sindicales ya estaban trabajando en ello, como la USO (que es el sindicato más antiguo en la región y a nivel nacional).
PBI: ¿Cómo está en la actualidad el movimiento social, aquí, en el Magdalena Medio?IVAN: ¡UF! esa pregunta es difícil. El movimiento social en el Magdalena Medio, es como las curvas cíclicas; tiene sus altibajos, pero también tiene sus logros y esas curvas alcanzan la cima. Somos los precursores de todo lo que se ha logrado a nivel social y político en Barrancabermeja, aunque la historia no nos lo reconoce. Hoy está de capa caída. A principios del año 2000, con la toma paramilitar, fue duramente debilitado. Muchas organizaciones desaparecieron, muchos líderes sociales y políticos importantes tuvieron que irse. Las que quedaron tuvieron que jugar un papel de muy bajo perfil. Esto ha permitido que el movimiento social se mantenga, pero que hoy no sea protagonista de esos procesos sociales y haya una limitada relación con la comunidad, con la población en general. Sin embargo, sigue generando iniciativas para la reivindicación de los derechos.
PBI: ¿Qué papel tiene Credhos en el movimiento social?IVÁN: Yo creo que Credhos siempre ha sido importante en las luchas por la búsqueda de soluciones a las problemáticas sociales que afectan los derechos humanos en la región. Hoy jugamos un papel importante en la búsqueda de la paz. Estamos desde hace dos años enfrascados en la construcción de espacios orgánicos, colectivos, incluyentes, grupales y comunitarios para construir una sola iniciativa de paz territorial en la región, llamando al movimiento social a que unifique criterios, opiniones y esfuerzos para esto. Porque si no logramos unificar una propuesta como tal, comunitaria y territorial que nos identifique a todos y a todas en la región, sencillamente nos van a imponer un modelo de paz territorial. Credhos juega el papel de interlocutor de la búsqueda de la construcción de ese espacio.
PBI: ¿Cuáles son los retos para ustedes en el contexto de las negociaciones en La Habana?IVÁN: Hemos logrado identificar qué puntos vamos a trabajar de los que han estado negociando en La Habana. Vamos a trabajar los puntos sobre víctimas y la participación política. Y el reto es lograr ser los promotores, veedores y verificadores de la implementación en el postconflicto.
PBI: ¿Qué impactos crees que se van a dar en la región con la llegada de los desmovilizados?IVÁN: Tenemos que aprender a construir espacios de reconciliación, ese es un gran desafío al movimiento social; no sabemos cómo va a ser el comportamiento ni de la comunidad, ni de los combatientes en su reintegración social, pero debemos apuntar a eso, a crear esos escenarios.
PBI: ¿Qué esperas de PBI en el contexto de paz en el país?IVÁN: Que nos siga acompañando. Yo creo que la presencia de la Comunidad Internacional es clave en la veeduría, en la garantía y en la implementación de todos esos acuerdos, sin la Comunidad Internacional difícilmente podremos lograr construir modelos de paz en las regiones.