Hoy 29 de noviembre, es el día internacional de las defensoras de derechos humanos. Ser defensora implica sin duda, un nivel de exposición y riesgos diferenciales y desproporcionados en su activismo. Esto tiene que ver con estigmatización que para una mujer defensora deriva de haber abandonado el espacio privado, que tradicionalmente nos asigna la sociedad y destinar fuerzas, tiempo y energías para la labor de defensa de derechos humanos tomando así, posición y protagonismo en el espacio público.
Las mujeres defensoras de derechos humanos sufren ataques como consecuencia de su activismo, pero también por el hecho de ser mujeres y estar ejerciendo un papel que es cuestionado socialmente. Los ataques van enfocados en su integridad física, psicológica y emocional, pero también se enfocan en sus familias y colectivos, tratando de este modo de romper más drásticamente el tejido social y culpabilizándolas a ellas por la actividad que desarrollan. La tortura y la violencia sexual, entran a ser destacadas estrategias claras de ataque en el caso de las defensoras, considerando el cuerpo de las defensoras como espacio a ocupar y poseer. Estos ataques tienen como finalidad generar, miedos, culpas y en última instancia impedir que surgan nuevos liderazgos de mujeres que defiendan la vida y el territorio.
Por esto, las violencias que sufren las defensoras, se podría enmarcar en un tipo de violencia basada en género enfocada en el accionar de las defensoras de derechos humanos y en base a esta realidad, tenemos que pensarnos acciones específicas para poder enfrentarlas.
[caption id="attachment_10677" align="alignnone" width="1200"] Los espacios de encuentros entre mujeres son importantes para poder desarrollar estrategias de resiliencias, y buscar apoyo mutuo para salirse de la culpa[/caption]
Tradicionalmente, el enfoque en protección a personas defensoras, se ha centrado en la protección física, olvidando o dejando de lado, la integralidad de la persona, olvidando otros ámbitos de afectación como pueden ser el emocional, el familiar o el digital. Estos otros ámbitos, en el caso de las defensoras de derechos humanos cobran todavía más relevancia y deberían ser claves a la hora de pensarnos la autoprotección desde una mirada más holística.
Según datos de Somos defensores de enero a julio de 2017 una lideresa/defensora de Derechos Humanos en Colombia, fue asesinada cada 26 días y medio. Para el año 2018, en el mismo periodo, la frecuencia es de 23 días. El incremento porcentual de los asesinatos a lideresas y defensoras de Derechos Humanos de 2016 a 2018 fue de 166,7%, según esta fuente. Según cifras de Indepaz, de enero a septiembre de este año han asesinado a 22 defensoras de derechos humanos en el País[1].
[caption id="attachment_10681" align="alignnone" width="1200"] En los encuentros regionales y nacionales de mujeres defensoras se realizan rituales[/caption]
En ese sentido, desde Brigadas Internacionales de Paz, tenemos un eje de trabajo de “Apoyo a la Reconstrucción del Tejido Social” desde el cual se cree que el autocuidado y cuidado mutuo, es una de las formas claves de continuar la lucha y los procesos de resistencia en territorio. Una forma de más de reconocimiento y de acuerpamiento entre mujeres. Son necesarios los espacios en los que se puede construir colectivamente, desnudar los miedos, nombrarlos y elaborarlos entre todas, repartiendo esa carga.
Reconociéndose en procesos de otras compañeras, haciéndose más fuertes, y teniendo claro que “siga la lucha, que somos muchas”. Deshaciéndose de la culpa que cargamos tan injustamente y que es una estrategia clara de victimización en el caso concreto de defensoras de derechos humanos.
Si reconocemos y entendemos que las afectaciones e impactos son diferentes, también tienen que serlo entonces las herramientas de autoprotección de impulsemos y pensemos para las defensoras.
De esta forma estuvimos trabajando el paso mes de octubre en Encuentro Regional de Género y apoyo psicosocial. La iniciativa Mesoamericana de Defensoras y PBI pudieron impulsar un Encuentro de defensoras que se enfocó en el acompañamiento psicosocial, y el autocuidado con perspectiva de género, repensando también nuevas formas de autoprotección desde una visión integral.
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=WUbmvYDg9qM&w=1280&h=720]
Casualmente, este día de reconocimiento y visibilización del trabajo de las defensoras de derechos humanos en el mundo, coincide con una invitación que nos hacen las compas de Honduras para unirnos a un “ twitazo mundial” por la justicia en Honduras, para la reivindicación y visibilización de las irregularidades del proceso del juicio de la causa de la defensora catracha Berta Cáceres con el hastag #CapturaALosAutoresIntelectuales, #FaltanLosAtala y #JusticiaParaBerta.
[caption id="attachment_10679" align="alignnone" width="1200"] En el Encuentro Regional de Mujeres Defensoras América Latina que se realizó en octubre 2018 junto con iniciativa Mesoamericana de Defensoras, vinieron mujeres defensoras de Guatemala, México, Honduras, Nicaragua, El Salvador y Colombia[/caption]
Elena Lopez-Maya[caption id="attachment_10676" align="alignnone" width="407"] Elena Lopez-Maya es nuestra encargada del acompañamiento psicosocial en el área de Apoyo a la Reconstrucción del Tejido Social[/caption]