Evelina C., Italia
¡Hola! Soy Evelina, nací en Italia y llego a Colombia después de haber formado parte, durante un año, del proyecto de Pbi en Guatemala. Fue una experiencia que me marcó profundamente. Un año lleno de momentos de alegría pero también de tristeza, de descubrimientos y de decepciones, de logros y frustraciones.. en fin, de muchos altibajos!
Un año que me dio la oportunidad de conocer a personas increíbles que, por defender los territorios en los que viven, por luchar en contra de la impunidad y, en definitiva, por defender los derechos humanos, están dispuestos/as a arriesgar sus vidas y siguen resistiendo a pesar de todo, a pesar de las amenazas, de los ataques, de los insultos y las difamaciones; a pesar del miedo que todo esto conlleva. Además, fue muy enriquecedor compartir todo esto con compañeras/os de trabajo provenientes de todo el mundo, cada uno con su bagaje y cada una/o comprometida/o a trabajar en equipo, bajo consenso y de una manera horizontal. Por todas estas razones, y más, decidí aplicar para el proyecto de Pbi Colombia, dando así continuidad a la experiencia de acompañamiento pero en otro contexto.
El país está enfrentando una situación tremendamente dramática, donde después del acuerdo de paz de 2016, las cifras de asesinatos de defensores y defensoras de derechos humanos, en vez de disminuir, han ido subiendo. Por eso considero que, lastimosamente, el trabajo de acompañamiento internacional sigue teniendo un papel importante para la protección de estas personas y para la apertura de espacios de acción de la sociedad civil.
Jocelyn R., Francia
¡Hola! Me llamo Jocelyn y soy de Francia. Después de haber trabajado unos años en el campo de la acogida de refugiados, me animé a apoyar el trabajo de los/as defensores/as de los derechos humanos en Colombia comprometidos/as en la construcción de un mundo más equitativo. Estoy convencido de que para construir una paz verdadera, uno tiene que comprometerse a su vez con todo su empeño. Además, la horizontalidad de la toma de decisiones en PBI y sus esfuerzos de reflexión sobre las temáticas de género constituyen para mí herramientas fundamentales para pensar una sociedad más justa y orientada hacia el futuro. Considero la experiencia de brigadista como una oportunidad única de crecimiento personal y para poner mis esfuerzos al servicio del fortalecimiento de los/as acompañados/as de PBI y sus comunidades.
Valentina C., España
Escribir algo coherente nada más aterrizar, con tanta información nueva, expectativas y emociones entremezcladas, me resulta complicado. Me pregunto de nuevo por qué estoy aquí y vuelvo al origen, a Madrid, hace un año, cuando comenzó este proceso de selección. Conocí PBI perdida en la red investigando qué ocurría en este país tan complejo e interesante. De pronto había más gente que conocía PBI, una amiga con la que estudiaba había estado año y medio en Urabá. La atormenté a preguntas. Me sorprendía mucho la forma de trabajar de PBI. Los principios de no violencia y no partidismo me parecieron fundamentales para la construcción de otro tipo de sociedad. Más allá del trabajo que realiza PBI en terreno -el acompañamiento a defensores y defensoras y a organizaciones de Derechos Humanos- el trabajo interno me parece una apuesta política sumamente desafiante. No es habitual en casi ningún tipo de estructura que las decisiones se tomen de manera horizontal, llegando a acuerdos por medio del consenso. Creo que va a ser un proceso de aprendizaje y de crecimiento. A pesar de la complejidad de la realidad colombiana: el aumento de asesinatos a defensores y defensoras de Derechos Humanos, la criminalización de las luchas sociales, la impunidad y la violencia política, me emociona que haya personas que están luchando por la construcción colectiva de una sociedad en la que otras formas alternativas a la violencia son posibles.
Samuel O., Reino Unido¡Hola! Soy Samuel y vengo del Reino Unido.
Vivía en Colombia desde 2016 a 2017 y me enamoré del país, sobretodo las zonas rurales como La Guajira y Putumayo. Desde mi llegada, empecé a aprender sobre la historia del país y la situación de las personas defensoras de derechos humanos. Fue así que conocí el trabajo de PBI. Descubrí que podría ayudar a brindar protección a personas que están trabajando para asegurar que toda la gente de Colombia tenga derecho a una vida sin violencia, miedo e injusticia.
Ya he tenido la oportunidad de conocer personas acompañadas y no me cabe la menor duda de que el trabajo de PBI, abrir espacios para esas personas, ayuda a construir una paz duradera.
Giulia L., Italia
¡Hola! Soy Giulia y vengo de Italia.
Me he acercado a PBI gracias a una amiga que me habló de la labor que desempeña en el territorio colombiano. Me llamó mucho la atención el hecho de ser una organización no jerárquica basada en la no violencia y el no partidismo. Considero el valor de la No-violencia como un principio transformador, un motor de cambio que puede abrir espacios de diálogo y de encuentro cuando éstos parecen imposibles.
Ser brigadista para mi significa tener una gran responsabilidad. Acompañar a Defensoras y Defensores de Derechos Humanos, que cada día ponen en riesgo sus vidas para hacer su trabajo, me genera mucha admiración. Y después de casi un año de selección y formación tengo muchas ganas de empezar en el equipo de Bogotá!
Gaia, Italia
¡Hola a todas y todos! Me llamo Gaia y vengo de Italia.
Fue durante de un largo viaje en tren, desde Italia hacia Francia, que un amigo me habló de PBI. Después de ese momento han pasado muchas cosas en mi vida, pero nunca se me quitaron de la cabeza sus cuentos encantadores sobre el trabajo de las personas brigadistas de terreno en las comunidades, o al lado de las personas acompañadas, personas valiosas que cada día ponen en riesgo sus vidas para defender los derechos humanos.
Hacer parte de PBI para mí significa poder hacer parte de un cambio importante; significa sembrar semillitas de paz para que finalmente haya justicia y la gente pueda conseguir su libertad, su tranquilidad, su felicidad. A través de herramientas como la no violencia y la no injerencia, brindamos presencia y cuidado físico y emocional a personas que luchan día a día por la verdad y la justicia.
Me siento muy afortunada y agradecida por poder estar pronto a su lado. A través de la escucha activa y de la empatía, de hecho, espero poder apoyar lo mejor que pueda para que las defensoras y defensores de derechos humanos puedan seguir realizando su preciosa labor.
¡Seguimos entonces para adelante, que con el tiempo las semillas se hacen grandes!
Marie Z., AlemaniaMe enamoré del país hace un tiempo – sus paisajes, el alma que rodea Colombia y, sobre todo, las personas que he podido conocer. Después de un año viviendo y trabajando en el país me di cuenta de que este es el lugar en el que quiero vivir, del que quiero aprender y en el que quiero florecer.
Sin embargo, la llamada “ayuda al desarrollo”, que se me ha presentado como forma típica del trabajo que se puede hacer como extranjera en Colombia, a mí, como trabajadora social, me generó un conflicto interno. Cuando finalmente conocí PBI, sus principios, su mandato y el concepto general, me sentía completamente reflejada. Este proyecto me permite usar los privilegios con los que crecí, no para imponer creencias, pensamientos y formas de ser; sino para que las personas que realmente conocen el contexto, el discurso y viven día a día la situación en el país puedan realizar su trabajo y defender los derechos humanos en un espacio seguro.
Tener ahora la posibilidad de ser parte de esta transformación es un honor para mí. Tengo esperanzas en un futuro en el que sea posible despejar el camino para las personas que son los autores y las autoras del cambio y que luchan por esta razón tan importante e inevitable: los derechos humanos para todos y todas.
Verónica L., España
¡Hola! Soy Verónica, española, aunque vengo a Colombia directa desde Bruselas donde he vivido los últimos 5 años. Cierro una etapa y abro una nueva con muchísimas ganas. Llego ilusionada por formar parte de PBI y poder acompañar a defensores y defensoras de derechos humanos en estos momentos tan importantes de la historia de Colombia.
Para mi PBI supone un camino de transformación personal y profesional, una reflexión constante sobre mis privilegios y cómo ponerlos al servicio de los demás. Estoy segura de que todos estos meses serán un camino de aprendizaje continuo que recorreré de la mano de personas maravillosas y luchadoras.
Me siento muy afortunada de poder estar hoy aquí viviendo esta experiencia.
Manuel M., SuizaPara mí, esta jornada empezó hace 10 años, durante un intercambio universitario en México. Desde entonces, estaba siguiendo procesos de derechos humanos en Latinoamérica. Realizando una investigación en México sobre procesos comunitarios y sobre los derechos colectivos de los pueblos originarios el año pasado, me hizo reflexionar sobre la forma correcta en la que uno puede implicarse para mejorar la situación de los DDHH. Además, la experiencia de vivir con lideresas y líderes comunitarios amenazadas/os me mostró los límites que sufren ellas/os mismas/os en su trabajo y me hizo abandonar la academia para buscar otro camino.
PBI me apasiona por su forma de trabajar, que implica – entre otros principios – la no injerencia. La no injerencia me parece fundamental. Estoy convencido de que es necesario facilitar procesos, abrir espacios de paz, sin tratar de imponer ningún tipo de visión, ni forma de trabajar.
Ahora, después de un año de proceso de formación y selección, estoy en Colombia, ¡por fin! Cada día estoy aprendiendo más sobre este país y estoy aún más motivado para ser parte de PBI y de la promoción de los DDHH en Colombia.
¡Bienvenidos y bienvenidas a PBI Colombia!