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"Trabajando en lo cotidiano por un mundo donde quepamos todxs y cada unx de nosotrxs"

"Trabajando en lo cotidiano por un mundo donde quepamos todxs y cada unx de nosotrxs"

Le damos una gran bienvenida a estas maravillosas personas que se acaban de unir al proyecto de PBI Colombia. Viajaron de Argentina, Irelanda, Chile, Italia, Grecia, el Estado Español, el País Vasco y Noruega para acompañar a personas defensoras de derechos humanos amenazadas por su labor. Aquí les presentamos:

Aldana, Argentina

Mi nombre es Aldana, de nacionalidad Argentina. Desde hace varios años conozco la labor que desempeña PBI en el territorio Colombiano y responden a muchos de los valores que me conducen.  A lo largo de mi vida me he formado en el área social y comunitaria, transitando espacios e instituciones que se relacionan con la defensa de los Derechos Humanos. Como mujer Latinoamericana estoy muy comprometida con las diversas realidades de nuestro continente. Cada una de estas realidades con su impronta particular, se identifican en una historia común, una historia cargada de lucha y resistencia. Es por esta razón que hoy me encuentro feliz de tener la oportunidad de estar al servicio de la comunidad de mi continente. Este es el gran motivo que me inspiró e inspira a ser parte del proyecto de PBI Colombia. Considero que es una organización que responde de manera concreta a las problemáticas que hoy atraviesa este país, colaborando en la construcción de una paz estable y duradera. Y por sobre todas las cosas, trabajando en lo cotidiano por un mundo donde quepamos todxs y cada unx de nosotrxs.

Delia, Chile

Hola! Soy Delia, chilena. El arraigado sentimiento de pertenencia y reconocimiento a este continente, me hace sentir comprometida con su historia, su maravillosa cultura y con la defensa de los derechos humanos, aquí tan vulnerados. En mi camino hacia aquí, desarrollé pasantías a nivel interamericano, tanto en la Comisión como en la Corte IDH, donde me correspondió analizar numerosísimos procesos, en todas sus instancias, de manera que mi acercamiento a este tema, hasta ahora, fue intelectual. Sin embargo, el gran impacto que me causó la violencia sociopolítica imperante en Colombia, que se arrastra por tantas décadas, me llevó a buscar una forma de colaborar más directamente en la defensa de los derechos fundamentales del pueblo colombiano. Fue así que, muy bien asesorada por mi amigo Fidel, que tenía excelentes referencias de PBI, decidí participar como brigadista de terreno en Colombia, (“tan linda y buena” -como le cantara el guajiro cubano Polo Montañez). Interactuar, colaborar, acompañar y observar de cerca los procesos de las organizaciones, defensores y comunidades que, incansablemente, contra viento y marea, persisten en su justa lucha, me pareció mucho más eficaz y gratificante que resumir cientos de páginas de procesos judiciales, donde sentía que mi aporte era exiguo. El enfoque de protección integral de PBI, sus mandatos, ejes de trabajo y principios, que he venido conociendo, me ha hecho sentir útil y absolutamente comprometida con lo que pretendía y vine a hacer. Convencida de que esta experiencia implica participar de la más pura riqueza humana y será un aprendizaje excepcional, me despido.

Tasos, Grecia

¡Hola! Me llamo Tasos y soy de Grecia. Me siento agradecido de participar en este proyecto con Brigadas de Paz y caminar con las personas defensoras quienes están facilitando el proceso de paz en Colombia. Hay mucho que aprender de las comunidades pacíficas y las defensoras de derechos humanos que arriesgan su vida por la lucha de un cambio social, justo y pacífico. Es un momento crítico para Colombia con muchos desafíos, pero al mismo tiempo el pueblo colombiano tiene la resiliencia y el poder para construir una paz estable y duradera.

Ruth, Estado Español

Siempre explico que tengo un CV muy variado, he sido bailarina, animadora turística, he trabajado en organización de eventos, hostelería y hasta tuve una agencia de viajes. Mientras trabajaba como azafata de vuelo para una aerolínea inglesa, estudié sociología. Y cuando decidí reorientar mi carrera profesional hacia el sector social, trabajé en un centro de emergencia para menores extranjeros no acompañados, pero me quedaba pendiente trabajar en terreno. Una de esas cosas que siempre había pensado hacer, pero por circunstancias todavía no había tenido la oportunidad. Descubrí PBI gracias a una compañera de un curso de logística humanitaria, me interesé por la organización y me pareció una muy buena manera de empezar en terreno. Poder aportar mi granito de arena y ayudar para que los defensores y las defensoras de derechos humanos en Colombia puedan seguir realizando su trabajo y así construir una paz duradera en este maravilloso país. ¡Me siento muy afortunada de tener la oportunidad de estar aquí y participar en este proyecto con PBI!

Jason, Irelanda

Llegué a Colombia por primera vez en julio 2016, un mes después de la firma del Acuerdo de Paz. Pasé dos años y medio viviendo en una Colombia en transición. Me pareció que había mucha esperanza para el futuro. Aunque me fui de Colombia a finales de 2018, seguí la situación en el país y el progreso del Acuerdo de Paz con mucho interés. Me decepcionó observar la trayectoria del país durante los últimos años y el aumento de violencia enfrentada por las personas defensoras de los derechos humanos y los líderes comunitarios. Quería volver para hacer lo que pudiera para apoyar el proceso de paz. Por suerte, una compañera me recomendó PBI. Me impresionaron mucho los principios y las estrategias de la organización, sobre todo la no injerencia. Me encantó la propuesta de poder proteger y facilitar, a través de acompañamiento, el importante trabajo de las organizaciones colombianas de derechos humanos. Ya hemos conocido a algunas personas defensoras en nuestra formación y me han inspirado muchísimo. Será un honor acompañarles. Me siento muy agradecido de estar aquí en Colombia con PBI y estoy muy emocionado de empezar.

Margherita, Italia

En 2019 escuché por primera vez el testimonio de un voluntario italiano que había pasado dos años en la comunidad de paz de San José de Apartado. Rara vez el compromiso no violento en medio de un conflicto, ya sea individual o colectivo, obtiene una resonancia internacional equivalente a las crónicas más oscuras de la guerra; nunca había oído hablar de la comunidad de San José y mi conocimiento sobre el conflicto colombiano se limitaba principalmente a unos pocos artículos académicos que trataban el tema mucho más conocido de la "guerrilla". Un año después, durante la maestría en “Derechos Humanos y Manejo de Conflictos”, una colega me habló de PBI y por segunda vez me encontré con el nombre de la comunidad, acompañada por la organización. Lo que más me llamó la atención del trabajo de PBI fue su compromiso de no injerencia respecto a la autodeterminación de los pueblos: no hay nada que como actores externos se pueda enseñar, o imponer, a quienes viven un conflicto todos los días y resiste de forma no violenta, si no al revés. Sin embargo, esto no significa permanecer neutrales ante las violaciones de derechos humanos, sino acompañar a las personas involucradas en procesos de paz, caminando a su lado. La profunda ética de trabajo de PBI es lo que más me impulsó a tomar este camino. Creo que el año y medio de voluntariado que tengo por delante con mi equipo en Urabá estará lleno de frustraciones y alegrías; sin embargo, estoy lista a afrontar este desafío con la auténtica felicidad de haber llegado hasta aquí, con la convicción de que el cambio, por pequeño que sea, siempre es posible.

Íñigo, País Vasco

Conocí PBI a través de varios informes en los que relataban la resistencia pacífica de la comunidad de San José de Apartadó. En ese entonces estaba cursando mi posgrado en Colombia y trabajando en temas de comunicación de Paz y Derechos Humanos. Mi gran interés durante mis años de especialización era el enlace entre acción humanitaria y construcción de Paz. Siento que por su trabajo PBI brinda este tipo de protección a todas esas personas comprometidas con la construcción de paz desde lo local mediante la defensa de todos esos derechos universales que se han visto afectados durante décadas de violencia. Las personas defensoras, de la vida, de la tierra, de la cultura, de su país y de su identidad y sus mecanismos de resistencia me inspiran a seguir por este camino que por el momento me ha traído hasta PBI.

Durante los próximos 18 meses estaré en Urabá y tendré la suerte de poder conocer a la comunidad de Paz de San José, a través de la cual conocí PBI. Sin duda será un tiempo lleno de aprendizaje y conocimiento sobre el trabajo colectivo de comunidades y las personas que lo conforman. Espero que durante estos meses pueda contribuir a la labor de las organizaciones y personas acompañadas y que todo esto sea un proceso mutuo en el que ambas partes podamos aprender.

Hannah, Noruega

Lo que me llamo la atención la primera vez que conocí a PBI, fue qué progresista y moderna es la manera de trabajar. Particularmente los principios de horizontalidad y la no injerencia son herramientas en las que tengo mucha confianza. Para lograr el fin de proteger el espacio alrededor de defensoras de derechos humanos, la no injerencia nos permite hacer exactamente eso: las personas defensoras son los expertos en su trabajo, y nuestro mandato es proteger su poder y derecho de hacer ese trabajo en paz. Cada vez más vemos que esta manera de trabajar es lo más sostenible. Cuando abrió la oportunidad de hacer este tipo de trabajo, sentí como había encontrado el mejor proyecto en trabajar en términos de derechos humanos. Siempre quise poner mi pasión en práctica. Mis estudios y trabajo hasta ahora se han focalizado sobre todo en el medio ambiente, la protección de las selvas del mundo, los océanos y los ecosistemas vulnerables. Si protegemos al espacio de las defensoras y defensores de los derechos humanos, al mismo tiempo protegemos al medio ambiente a largo plazo. Son dos caras de la misma moneda. Me alegro mucho que me ha presentado la oportunidad de trabajar con PBI en Colombia. Creo que ser brigadista requiere habilidades analíticas, compromisos fuertes y pasión para los principios de la organización, y ese me suena mucho. Creo que también va a ser un aprendizaje para la vida, y muy enriquecedor para mí, personalmente.
 ¡Bienvenidas y bienvenidos a PBI Colombia!