La hermana Maritze es una gran defensora de derechos humanos que, a lo largo de los años ha acompañado a comunidades víctimas de la violencia sociopolítica y del conflicto armado, en su búsquedas de justicia, de verdad, y garantías de no repetición. Uno de los procesos que ha acompañó, es a la Asociación de Familias Víctimas de la Masacre de Trujillo (AFAVIT). Esa masacre ocurrió entre 1988 y 1994 en tres municipios del valle del Cauca (Trujillo, Bolívar y Riofrío) donde aproximadamente 340 personas fueron víctimas de desapariciones forzadas, torturas y asesinatos, por parte de estructuras de tipo paramilitares en asociación con entidades y miembros de la Fuerza Pública. En 1992, el caso fue presentado en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) siendo el primer caso presentado al nivel nacional, y que resultó en una solución amistosa y acto de pedir perdón por parte del Estado colombiano a las víctimas[1].
Unas de las características importantes del trabajo de memoria de la masacre de Trujillo ha sido la organización de peregrinación y la construcción de un monumento de la memoria considerado como el más grande de América Latina. En el 2003, se dio la tercera peregrinación en memoria de las víctimas donde se permitió el traslado de los restos del Padre Tiberio, víctima emblemática de esta masacre. La hermana nos cuenta esta historia.
https://youtu.be/hhI7GEXHNkw
PBI Colombia