Según Frontline Defenders, durante el año 2016 fueron asesinados 85 defensores de derechos humanos. Para el trabajo de PBI todas estas amenazas de muerte han significado un trabajo continúo e intenso de acompañamiento internacional. Nathalie es una de las brigadistas que sale a menudo al terreno para estar con los líderes más amenazados. Aquí cuenta cómo fue uno de estos acompañamientos.Una mañana en diciembre, Bogotá amaneció con sol y un cielo luminoso, salí temprano hacía el aeropuerto. Viajaba a Sincelejo para realizar unas reuniones con autoridades locales, con el objetivo de transmitir nuestras preocupaciones después del atentado que había sufrido Argemiro Lara el pasado 17 de noviembre[1]. Sin embargo, llegué al aeropuerto con la noticia que estaba cerrado por condiciones climáticas, al mirar por la ventana vi que la niebla cubría las pistas. Después de un par de horas, mientras estábamos esperando en el avión el permiso de despegar, me llamaron mis compañeros de equipo para avisarme de que había habido un nuevo atentado en Sincelejo, en contra de Rodrigo Ramírez, integrante del Movice[2]. Me comentaron que el escenario era similar a lo que le había pasado a Argemiro, pero que no tenían más noticias, ni cómo estaba Rodrigo, si le habían herido o no. De repente todo era muy confuso... y sentí un poco de angustia. [caption id="attachment_6938" align="alignnone" width="1200"] Argemiro Lara y Rodrigo Ramírez[/caption] Conocí a Rodrigo a finales de noviembre, cuando vinieron a Bogotá después del atentado contra de Argemiro. Es un hombre alto, joven, muy comprometido con su trabajo y acompaña a diferentes procesos en Sucre: la Finca La Europa, la Finca La Alemania, la Comunidad de Zispataca. Le había comentado de nuestra visita a Sucre por si nos podíamos encontrar en esos días y él me había compartido sus preocupaciones sobre la situación en Sucre en general. Antes de llegar a Sincelejo logré comunicarme con él, estaba a salvo pero muy preocupado. Nos encontramos por la noche y nos explicó lo sucedido esa mañana. Este era el segundo atentado, en menos de un mes, contra líderes de restitución de tierras en Sucre, y en los dos casos las autoridades locales y la prensa local los presentaron como si fueran hurtos. Sin tener en cuenta el trabajo que realizan estas personas para la defensa de los derechos humanos y el territorio. Argemiro Lara es el presidente de la Asociación de Campesinos y Campesinas de la Finca La Europa, miembro del Movice y del Cpdh. Cuando vino a Bogotá tuvimos la oportunidad de entrevistarlo[3].
Tintico con PBI: “Hay que resolver el tema de la tierra”[caption id="attachment_5539" align="alignnone" width="1200"] Argemiro Lara es uno de los líderes que intentan recuperar la Finca La Europa, un predio de 1.233 hectáreas, que fue despojado al campesinado que cultivaba esas tierras en el año 2000, en plena ofensiva paramilitar. Es reclamante de tierra, defensor de derechos humanos del Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos (Cpdh) y del Movimiento de Víctimas de Crímenes del Estado (Movice); también es el presidente de la Asociación de Campesinos de la Finca La Europa. En 2016, él ha denunciado en varias ocasiones las amenazas que ha sufrido frente a la Fiscalía, pero ninguna ha tenido respuesta.[/caption]
Hace varios años que están en procesos de restitución de tierras y hasta el día de hoy hubo pocos avances, y muchos campesinos y campesinas no se atreven a retornar por la falta de garantías. Por ejemplo, en 2016, ambos líderes que sufrieron los atentados, previamente habían recibido varias amenazas. En nuestro viaje de acompañamiento también fuimos a visitar a la Finca Europa, visitamos a Argemiro, quien se sentía más tranquilo, pero todavía algo preocupado y con ganas de avanzar y seguir con su lucha para la restitución de las tierras.
Nathalie (Brigadista Belga de PBI Colombia)