Manuel Ruiz fue uno de los líderes más activos en el proceso de restitución de tierras en las cuencas de los ríos Curbaradó y Jiguamiandó, ubicados en el Bajo Atrato chocoano. Este proceso se enmarcaba dentro del Plan de Choque (procesos de restitución de tierra prioritarios y acelerados) del Gobierno del Presidente Juan Manuel Santos[1]. Manuel Ruiz participó en el Comité de Censo establecido para cooperar en la identificación de las personas desplazadas de la cuenca y así establecer las personas con derecho a la restitución de tierra.
Durante todo este proceso, la Comisión Intereclesial de Justicia y Paz (Cijp), quien acompaña varias comunidades del Bajo Atrato ha denunciado la presencia de grupos de neoparamilitares y el incremento de amenazas a líderes y lideresas de la zona. Sin embargo, a pesar de haber avisado a los funcionarios del Estado de su situación de riesgo y las amenazas de muerte en su contra, el 23 de marzo de 2012, Manuel Ruiz es asesinado, junto con su hijo menor, Samir Ruiz, por presuntos paramilitares[2].
Su hijo James Ruiz, quien retomó el liderazgo de su padre cuenta que tras el asesinato de Manuel y de Samir, la familia Ruiz tuvo que desplazarse.
Sin embargo, en 2013, con el acompañamiento de Cijp y de PBI, se pudo organizar el retorno de la familia Ruiz a su finca, ubicada en Apartadocito, territorio colectivo de Curbaradó, conformándose en Zona Humanitaria. Hasta el día de hoy la familia Ruiz vive en el territorio, esperando la restitución a pesar de las amenazas que nunca cesaron en contra de su familia[3].
https://youtu.be/c-rXzeLETDI
PBI Colombia