Pasar al contenido principal

"So Bia Drua": Tierra Feliz de las comunidades embera

"So Bia Drua": Tierra Feliz de las comunidades embera

"Tierra feliz" o So Bia Drua, en lengua embera, es como las comunidades indígenas del Resguardo Humanitario Ambiental Uradá-Jiguamiandó se refieren a su territorio, ubicado en el municipio de Carmen del Darién, departamento del Chocó.

El Resguardo comprende dos lotes discontinuos donde se ubican 8 comunidades indígenas embera. En el primer lote habitan las comunidades de Alto Guayabal (125 familias con 365 personas), Bidόkera Ancadía (26 familias con 90 personas) y Jaibía Coredocito (24 familias con 75 personas). En el segundo: Dearadé (18 familias con 59 personas), Ibudó (25 familias con 107 personas), Padadó (12 familias con 43 personas), Chansodo (31 familias con 128 personas) y Urada (60 familias con 230 personas).

Los principales cursos de agua que atraviesan el Resguardo son los ríos Ancadía, Jiguamiandó, Urada y Tamboral, todos ellos ramificaciones del río Atrato, que recorre todo el departamento del Chocó, en la Costa del Pacífico colombiano. Los ríos son una importante fuente de sustento para las comunidades del Resguardo Uradá-Jiguamiandó, que se dedican a la pesca y usan el agua dulce para sus actividades cotidianas.

[caption id="attachment_13503" align="alignnone" width="4608"] Una de las maneras de llegar a la comunidad de Alto Guayabal es a contracorriente por el río Jiguamiandó, afluente del río Atrato, que atraviesa todo el departamento del Chocó.[/caption]

Las comunidades del Resguardo Urada-Jiguamiandó se relacionan con el medio natural de manera armónica, obteniendo las plantas medicinales que necesitan para curarse, pescando en el río y cuidando su entorno, que han conservado libre de contaminación.

[caption id="attachment_13494" align="alignnone" width="4608"] PBI acompaña a la Comisión de Justicia y Paz (JyP) en la comunidad de Alto Guayabal del Resguardo Uradá-Jiguamiandó.[/caption]

Las comunidades indígenas son en realidad las únicas protectoras de la tierra y medioambiente. Y, a pesar de que conviven en armonía con su entorno natural, múltiples intereses sobre su territorio siguen impidiendo que puedan habitar en sus tierras ancestrales en paz.

Entre las amenazas que enfrenta el pueblo embera, víctima de numerosas violaciones de derechos humanos en el marco del conflicto armado, se encuentran los megaproyectos mineros. Las comunidades, que se han opuesto desde hace décadas a los proyectos extractivistas, saben que con la minería se dañan los acuíferos, se contamina el suelo, el agua, el aire y hay pérdida de biodiversidad. Y como consecuencia de todo ello existe un serio riesgo de desplazamiento y desarraigo cultural.

[caption id="attachment_13497" align="aligncenter" width="366"] Guardia indígena, reconocible por el típico palo que representa su papel de garante de la seguridad dentro de la comunidad. Tanto hombres como mujeres pueden unirse a la Guardia.[/caption]

Las comunidades que viven en So Bia Drua están representadas por el Cabildo Mayor embera – CAMERUJ. Entre los integrantes del Cabildo Mayor, máxima autoridad indígena, se encuentra Argemiro Bailarín, uno de los líderes emblemáticos del Resguardo Uradá-Jiguaminadó.

Argemiro, es ampliamente conocido por su defensa del territorio, la paz y la protección de la cultura y cosmovisión embera. En noviembre de 2021, con motivo del quinto aniversario de la firma de los Acuerdos de Paz entre el Gobierno y las Farc-EP, el líder embera participó en el programa de radio "Voces de la Tierra" [2], en el que el dirigente indígena denuncia que las comunidades siguen expuestas a la violencia del conflicto armado, en medio del actuar de grandes proyectos mineros y agronegocios, que ven el territorio como objeto de negocio.

Con el apoyo de la Comisión de Justicia y Paz (JyP), las comunidades de Jiguamiandó, junto a muchas otras de diferentes zonas de Colombia, solicitan desde marzo de 2020 un Acuerdo Humanitario Global, que implique un cese al fuego, en medio de un recrudecimiento del conflicto y un aumento de acciones bélicas[1]. Hasta la fecha, no ha habido respuesta por parte del Gobierno a las 42 cartas enviadas por más de 150 comunidades.

Lea sobre las amenazas que enfrenta el pueblo embera, que defiende su cerro sagrado de la megaminería y su derecho a vivir en paz en su territorio ancestral: "El pueblo embera en defensa de su territorio".

Fotógrafa: Margherita Forni

PBI Colombia


[1] Somos Génesis: CartAbierta 42 – Parar la guerra, afirmar la Vida y la justicia socio ambiental, 4 de enero de 2022. [2] "Voces de la Tierra" de la mano de la periodista Laura Casielles, en colaboración con Brigadas Internacionales de Paz, es una sección del programa de radio on-line "Carne Cruda", en la que personas defensoras, líderes y lideresas indígenas y activistas cuentan su realidad desde el territorio.