Mujeres, indígenas, afrodescendientes citadinas, niñas, adolescentes, jóvenes, adultas, mayores, las que están naciendo, las que se han ido ya… !en fin!, todas las mujeres en países como Colombia han recibido algún tipo de violencia.
Esa violencia histórica, estructural ha dejado marcas, cicatrices en las mujeres; para muchas ha sido normal, para su entorno incluso ha sido y, hoy en día es invisible, es parte natural de lo cotidiano. Mujeres que han defendido por siempre la vida, la de sus hijos, la de sus parejas, de sus familias.