¿De qué desarrollo estamos hablando?
¿Hay algo, además del desarrollo, que se quiera tanto?
¿Hay algo, además del desarrollo, que se quiera tanto?
El 2022 estuvo marcado por las elecciones legislativas y presidenciales en Colombia que generaron un cambio histórico en el Gobierno del país, alimentando nuevo interés de la comunidad internacional ante ese cambio político. Desde PBI aprovechamos para insistir en la importancia de implementar garantías para la defensa de los derechos humanos en Colombia, ya que sigue siendo urgente abrir espacios para la construcción de paz con enfoque territorial tal como lo proponen las comunidades.
«Reconociendo nuestras historias y las de nuestros territorios, deseamos caminar junto con los procesos que intentan elaborar nuevas narrativas en las cuales el dolor y la violencia buscan transformarse en ruta para la justicia y dignidad de los pueblos.
Desde PBI hemos venido hablando de nuestra idea del círculo de protección, de cómo protegernos implica tener en cuenta muchas dimensiones de los impactos de las violencias: la dimensión espiritual o de sentido, la dimensión psicoemocional o corporal, la dimensión grupal-relacional y, ahora, queremos hablar de la dimensión territorial o de proyecto.
Durante el Encuentro de Mujeres Defensoras de 2023, reunidas, con las manos llenas de objetos de nuestros territorios, construimos un círculo de protección. Una mandala que envolvía la sala que nos acogió durante el encuentro y que fue testiga de muchos bellos momentos de creación, ternura y diálogo entre mujeres.
Érase una vez un pájaro en una playa…
Érase una vez diez leonas…
Érase una vez una veintena de defensoras…
El nuevo presidente de Colombia, Gustavo Petro, definió desde su toma de posesión que la política de la “Paz Total” sería una de las prioridades de su agenda. Esta política busca la apertura de diálogos y la desmovilización de todas las estructuras armadas ilegales.
El 21 de febrero se conmemoró la masacre de Mulatos y la Resbalosa, perpetrada por la Brigada XVII del Ejército y el grupo paramilitar Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), en la que fueron asesinadas 8 personas, de las cuales 7 eran miembros de la Comunidad de Paz de San José de Apartadó y 3 de ellas menores de edad
Casi dos años después del Paro Nacional de 2021, los altos mandos de la Fuerza Pública, investigados por las graves violaciones de derechos humanos cometidas en la represión de las protestas, siguen en plena impunidad.
Hace 18 años ocurrió un hecho que marcó a la Comunidad de Paz de San José de Apartadó: la Masacre de Mulatos y La Resbalosa, en donde fueron cruelmente asesinadas 8 personas, de las cuales 3 de ellas menores de edad.